La vida de Mikio Naruse I
Mikio Naruse nació en Tokio, Japón, en 1905. Hijo de una familia muy pobre, se crió en medio de las dificultades y la carencia de recursos. Muy joven ingresó a trabajar a los estudios Shochiku como utilero y luego como asistente de dirección. Sólo en 1930 le permitieron realizar su ópera prima, La señora de las espadas (Chanbara fufu), una mezcla de comedia y melodrama, el sello característico de dicha casa productora. Allí hizo otro par de films, pero muy pronto fue despedido por su poco interés en combinar lágrimas con risas, según le pedía Shido Kiro, su jefe en Shochiku.
Fue así como ingresó a Toho, la casa productora en la cual trabajó hasta el final de sus 47 años en la industria del cine donde realizó 88 films, en sus 37 años como realizador. Era un hombre taciturno, poco amigo de sus superiores, su equipo de trabajo y sus actores, mientras persistía en sacar adelante films de calidad realizados con rapidez y a bajos costos.
En Toho bien pronto fue adquiriendo un creciente éxito comercial y también de la crítica lo que se consolidó con su primer gran éxito Kimiko (¡Esposa, sé como una rosa!) en 1935. Además de ganar el Kinema Junpo, fue la primera película japonesa en exhibirse en los teatros de Estados Unidos (donde no fue bien recibida). Cuenta la historia de una mujer que se va a vivir al campo mientras aprende a renovar su fe en el la familia nuclear moderna.
Durante la guerra, Naruse tuvo una crisis con su esposa, lo que según él mismo lo llevó a un bajón creativo, pero en los años siguientes retomó impulso dirigiendo películas con guiones de otros. Éxitos notables de esta época son Madre Okasan (1952), una mirada realista a la vida hogareña en la época de posguerra que fue distribuida en Francia y Nubes Flotantes Ukigumo (1955) la historia de un amor condenada al fracaso. Es la historia de una mesera tratando de adaptarse a las exigencias de la modernidad, es un film notable por su ausencia de primeros planos y escenas rodadas en exteriores. Nubes dispersas, Midaregumo (1967) su último film, una de sus obras maestras, cuenta el amor imposible entre una viuda y el conductor que accidentalmente ha atropellado al esposo que proveía su sustento.
Naruse se benefició del trabajo con magníficas actrices y de la colaboración en los guiones con consumadas escritoras como Fumiko Hayashi. Su extraordinaria capacidad para penetrar la experiencia femenina y su agudo entendimiento y detallada elaboración de los sentimientos de las mujeres que son el sello de sus films, son tal vez en parte debido al trabajo con guionistas como Sumie Tanaka y Yoko Mizuki.
Naruse murió en 1969 y empezó a ser reconocido internacionalmente en 1984 con la primera retrospectiva de sus films organizada por Audie Bock
Diciembre 6th, 2005 at 18:25
HOLA ALVARO.
Comento acerca del post anterior. Cierto, las mujeres sufren una mayor vulnerabilidad. Hasta frente al alcoholismo y otros fenómenos sociales de caracter universal, con rasgos específicos de cada sociedad. Puliqué dos temas acerca de ello.
Hasta pronto
Diciembre 6th, 2005 at 19:46
Álvaro, solo paso para saludarte, enterarme de Mikio y reportarme, porque mi bitácora se desintegró y tuve que crear otra.
Abrazo,
Julio
Diciembre 7th, 2005 at 3:15
Buen artículo. tentador y didáctico. De hecho que no tenía ni idea de este director. A decir verdad, de muchos de ese lado del mundo. Voy a buscarlo y ojalá lo halle. Un abrazo. ya te contaré.
Diciembre 7th, 2005 at 6:52
Si fuera posible ver pronto sus películas: quizás la Filmoteca las presente…
Diciembre 7th, 2005 at 13:33
Los orientales parecen tener una sensibilidad especial para profundizar en la mente y los sentimientos de la mujer. Me encantaría disfrutar de una de sus películas.
Diciembre 7th, 2005 at 13:49
Zenia:
Me interesa leer lo que publicaste y pasaré a verlo. Gracias por tu comentario que me parece sirve mucho para ubicar los temas tratados en estos films que espero ir reseñando.
Oscar:
De hecho se encuentran copias de los DVD con subtitulos en español en DVDgo.com que creeo es una empresa española y es posible comprarlos en Internet. El precio de envío es módico para los españoles pero no para los paises latinoamericanos.
Vir:
Ojalá puedas acceder a este autor.
Eva Ruiz:
Tienes toda la razón. Otro contemporáneo de Naruse, Kenji Mizoguchi es un ejemplo de lo que dices.
Mayo 10th, 2006 at 11:33
[…] Estoy terminando de escribir un artículo para la revista Kinetoscopio, sobre el gran director de cine japonés, Mikio Naruse. Se trata quizás del maestro más grande del cine japonés que Occidente ignoró por muchísimos años y cuyas películas empezaron a ser vistas y estudiadas tres décadas después de su muerte. […]