Las democracias no existen así no más, hay que ampliarlas. Deberíamos avanzar de la democracia representativa (un congreso elegido por los ciudadanos) hacia formas democráticas más participativas donde la vigilancia y participación activa de los ciudadanos ayude a que las leyes sean más justas y solidarias dejando de beneficiar (como su suceda ahora) a pequeños grupos de gran poder económico.
Hace unos seis meses encontré el Portal del Congresista Virtual de Colombia una iniciativa de participación ciudadana magnífica. Se trata de una reproducción de lo que con mucho éxito implementó el Senado chileno en un país que por lo visto está pensando en lo digital de una manera mucho más dinámica que Colombia. Es más, el diseño y funcionamiento de todo el sitio fue cedido (imagino que sin costo alguno) por los senadores chilenos a sus pares colombianos en un acto solidario sorprendente. Y digo sorprendente porque los países latinoamericanos, sobre todo a nivel político y cultural, no se comportan como vecinos, sino como entes ajenos y lejanos. Algún autor dijo que Latinoamérica parecía y se comportaba más como un archipiélago de islas que como el continente que es y debiera ser.
En fin que a pesar de múltiples intentos, no me fue posible interactuar con las páginas del Congresista Virtual de la República de Colombia, a pesar de que en ellas prometen abrir un canal para que los votantes y ciudadanos que eligieron a sus representantes puedan a su vez seguir el trámite de las leyes en el Congreso, opinar y votar (simbólicamente) en torno a ellas.
Pero las páginas de éste “Senado” parecen un orificio negro, es imposible comunicarse con sus gestores, el Webmaster (o mayordomo) nunca contesta los mensajes que se le envían, y a pesar de que hay listados de los correos electrónicos de algunos senadores a quien dirigirse, lo cierto es que tampoco funcionan.
En suma, dichas páginas cuyo mantenimiento y gestión deben costarle una millonada a los bolsillos de los contribuyentes colombianos, se han convertido en otro de los elefantes blancos digitales que existen en la Internet según lo ha constatado a su vez Javier, en su excelente blog Blueelephant’s Ballad (more…)